Un movimiento es rectilíneo cuando
un objeto describe una trayectoria recta, y es uniforme cuando
su velocidad es
constante en el tiempo,
dado que su aceleración es
nula. Es indicado mediante el acrónimo MRU, aunque en algunos países
es MRC, por movimiento rectilíneo constante.
El
MRU se caracteriza por:
-
Movimiento que se realiza sobre una línea recta.
-
Velocidad constante; implica magnitud y dirección constantes.
-
La magnitud de la velocidad recibe el nombre de celeridad o rapidez.
-
Aceleración nula.
La
distancia recorrida se calcula multiplicando la magnitud de
la velocidad por
el tiempo transcurrido. Esta relación también es aplicable si la
trayectoria no es rectilínea, con tal que la rapidez o
módulo de la velocidad sea constante. Por lo tanto el movimiento
puede considerarse en dos sentidos; una velocidad negativa representa
un movimiento en dirección contraria al sentido que
convencionalmente hayamos adoptado como positivo.
De
acuerdo con la Primera
Ley de Newton,
toda partícula permanece en reposo o en movimiento rectilíneo
uniforme cuando no hay una fuerza externa que actúe sobre el cuerpo,
dado que las fuerzas actuales están en equilibrio, por lo cual su
estado es de reposo o de movimiento rectilíneo uniforme. Esta es una
situación ideal, ya que siempre existen fuerzas que tienden a
alterar el movimiento de las partículas, por lo que en el movimiento
rectilíneo uniforme (MRU) es difícil encontrar la fuerza
amplificada.